En un acto de posesión austero en la Plaza Botero, el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, juró como nuevo mandatario de los Medellinenses y a reglón seguido afirmó, “A partir de hoy, a partir de este preciso momento se acaban las mentiras, el odio, la división y la corrupción en nuestra Medellín. A partir de hoy comenzamos a unir de nuevo a nuestra gente. Ser de nuevo su alcalde me llena de orgullo”.
La posesión en la Plaza Botero, estuvo cargada de simbolismo, entre ellos, derribar el llamado “Abrazo a Botero” retirando las vallas. Una estrategia del ex alcalde Daniel Quintero, con la que pretendía devolverle la seguridad al lugar y que generó conflictos incluso con el maestro Fernando Botero.
“Hoy estamos aquí derribando muros y barreras a partir de hoy este espacio se vuelve a integrar al espacio público de la ciudad. […] llegamos a unir no segregar ni a dividir, y no llegamos a esconder problemas, este es un sitio de los más conflictivos hoy en materia de orden público y en materia social elegir estar acá y el día de nuestra posesión es un símbolo importante frente a la importancia que le damos a la cultura”, dijo el mandatario.
Durante el discurso el mandatario se refirió a la familias de Medellín y la lucha que emprenderá contra el hambre. Se refirió al programa Buen Comienzo y se comprometió aumentar gradualmente los días de atención en todas las modalidades “de los 197 días de atención que hoy brinda al año, se pasará a los 365”.
El alcalde habló de varias líneas de trabajo y poblaciones a las que espera llegar con su gobierno: A lo jóvenes, a los niños y niñas de Medellín, se refirió a EPM, a Emvarias, habló del turismo en la ciudad y a la protección de los medellinenses para que no tengan que desplazarse por el encarecimiento de vida.
Finalmente, envió un mensaje tanto a lo que votaron por él como a lo que no, refiriéndose a la importancia de estar de acuerdo en lo fundamental, “. En que lo público es sagrado. En que los recursos se invierten donde más se necesitan y no en beneficios individuales ni oscuros”.
Su mensaje final estuvo dirigido al gobierno nacional, con apertura para el dialogo en la construcción de ideas comunes para Medellín y Antioquia, “presidente Petro, no nos castigue por representar la oposición: es un grave error. Medellín y Antioquia son Colombia. Trabajemos juntos por la gente; para eso nos eligieron”, puntualizó el alcalde.