Residentes del edificio Gran Manzana Apartamentos en Itagüí envenenaron a Fibo, un perro criollo negro, según denunció su amo. Después de un paseo matutino en la terraza del edificio, Fibo mordió un palo y su comportamiento cambió. Durante el día, Fibo tuvo vómito y diarrea, y finalmente su dueño lo encontró muerto debajo de un sofá en casa.
El alcalde de Itagüí, Diego Torres, condenó el maltrato animal y se comprometió a apoyar la investigación a través de la Secretaría de Medio Ambiente. Declaró que en Itagüí no toleran el maltrato animal y expresó su apoyo a la familia de Fibo, que llora su pérdida. La Secretaría de Medio Ambiente y la unidad veterinaria forense colaborarán con la Fiscalía para esclarecer el caso y encontrar al responsable.
El dueño de Fibo afirmó que la administración del edificio se niega a mostrarle las grabaciones de las cámaras de seguridad de la terraza, lo que sugiere que están ocultando algo. Exige justicia para Fibo y menciona que este no sería el único caso de envenenamiento en el edificio residencial, lo que aumenta la preocupación entre los vecinos.
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Además, el alcalde enfatizó que Itagüí es una ciudad inclusiva y exhortó a la comunidad a reflexionar y cuidar unos de otros. Insistió en la importancia de respetar la vida de todos los seres vivos y en trabajar juntos para mantener la armonía en la ciudad.
La administración del edificio aún no ha respondido a las acusaciones, pero la comunidad sigue presionando para que se haga justicia y se tomen medidas para evitar futuros incidentes de maltrato animal.